Los padres, el personal educativo y otros adultos que se preocupan sobre el problema tienen un rol que desempeñar en la prevención del acoso. Ellos pueden:
Ayude a los niños a entender el acoso Explicarles qué es el acoso y cómo enfrentarlo de manera segura. Decirles a los niños que el acoso escolar es inaceptable. Asegurarse de que los niños sepan cómo recibir ayuda. Mantener abiertas las líneas de comunicación, Hablar con los niños de forma regular. Escucharlos. Conocer a sus amigos, preguntarles sobre la escuela y comprender sus preocupaciones. Aliente a los niños a hacer lo que aman. Las actividades, intereses y pasatiempos especiales pueden estimular la confianza, ayudar a los niños a hacer amigos y protegerlos de situaciones de acoso. Dé el ejemplo de cómo tratar a otros con amabilidad y respeto.
¿Cómo se puede prevenir la violencia en la comunidad?
La experiencia y los estudios de investigación realizados muestran claramente que es posible prevenir la violencia y disminuir sus efectos, de la misma manera en que las medidas de salud pública han logrado prevenir y disminuir en muchas partes del mundo las complicaciones relacionadas con el embarazo, las lesiones en el lugar de trabajo, las enfermedades infecciosas y las afecciones resultantes del consumo de alimentos y agua contaminados.
¿Qué se puede hacer para evitar la violencia en la escuela?
Establecer un equipo de coordinación en la escuela para hacer frente a la violencia. Fortalecer el conocimiento y las competencias del equipo de coordinación. Formular una política escolar que condene la violencia y se aplique de manera justa a todo el mundo. Elaborar un plan de acción.
¿Qué es la violencia en la comunidad?
La violencia en la comunidad es un término muy amplio que incluye actos de violencia dirigidos a lastimar a otros y que son cometidos en áreas publicas. – Si has sobrevivido violencia comunitaria, sabemos que la vida no parece la misma después de eso. CVTC puede ayudarte a retomar una sensación de control y a sanar de lo sucedido.
¿Qué es la violencia y cómo se puede evitar?
La violencia es el uso intencional de la fuerza o el abuso de poder para dominar a alguien o imponer algo. Se puede manifestar a través de comportamientos que involucran: La fuerza física, para lastimar, dañar o matar a alguien. Las acciones verbales y gestuales, para rebajar o descalificar la idea o postura de alguien.
¿Cuáles son las causas de la violencia en la comunidad?
Policia reprime a los manifestantes de Altamira, Caracas (Venezuela), en febrero de 2014. Imagen Wikimedia Commons. Las ciudades segregadas, donde la concentración de la riqueza se acumula en ciertas zonas en detrimento de otras, generan desigualdad socio-espacial.
Estas desigualdades, injustas y expresión de la violencia producida por la especulación inmobiliaria, los recortes o la falta de oportunidades para la juventud, se encuentran como causa transversal de la violencia urbana. Sin embargo, no en todas las ciudades del mundo, estas causas se encuentran en la base de la violencia.
Los investigadores del Centro de Investigación de Desarrollo Internacional explican en este corto-documental, algunas de las principales causas de la violencia urbana en distintos países: En resumen, algunas de las causas que se detallan según los distintos especialistas son:
La pobreza, la exclusión de los mercados laborales, capitales o de tierras y las desigualdades sociales son consideradas “causas radicales” de la violencia, pero también hay “causas inmediatas” como la falla de la gestión de los estados o la corrupción institucional. Tener expectativas de futuro o bien esperanza puede ser un paliativo para la violencia en las ciudades. La falta de expectativas y la desesperanza pueden conducir a frustraciones y ira, caldo de cultivo para la violencia en las calles. La falta de cohesión social y las malas relaciones dentro de la comunidad, pueden suponer una causa de conflicto y de violencia urbana. La mala gestión urbanística y la falta de planificación de las ciudades puede conllevar a conflictos de territorio, económicos y sociales que pueden desembocar en violencia. Las relaciones de género pueden suponer un factor más de riesgo. Los conflictos bélicos y las guerras generan falta de oportunidades laborales, violación de los derechos humanos fundamentales como el de la vida y condiciones de pobreza extrema, subyacentes en los brotes de violencia urbana de algunos países. Las injustas reglas del juego en el tablero de la vida urbana, que benefician a unos y desfavorecen a otros, pueden ser también un gran causantes de la violencia urbana que nos encontramos en distintos puntos del planeta.
¿Qué es la violencia y cómo se puede evitar?
La violencia es el uso intencional de la fuerza o el abuso de poder para dominar a alguien o imponer algo. Se puede manifestar a través de comportamientos que involucran: La fuerza física, para lastimar, dañar o matar a alguien. Las acciones verbales y gestuales, para rebajar o descalificar la idea o postura de alguien.
¿Cómo podemos reflexionar acerca de la violencia?
Reflexiones por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer Cada 25 de noviembre, se conmemora este día, con la finalidad de concientizar sobre esta problemática. La autora plantea revisar valores y promover una cultura de la paz.
“Hoy tengo miedo, siento que me falta el aire, no puedo ni caminar, me caí por las escaleras eso le dije al médico pero la realidad es que él me pegó otra vez y solo porque le reclamé el que no durmiera en la casa. El se arrepiente, me suplicó de rodillas que lo perdonara, que no lo volvería a hacer.
Yo lo perdono porque él me ama” Cuando hablamos de violencia contra las mujeres nos referimos a un hecho que es sistemático e invisible que se extiende por todo el mundo. Hoy una de cada tres mujeres y niñas siguen siendo víctimas de violencia. Para comprender mejor el fenómeno de la violencia tenemos que verlo en el contexto de nuestra sociedad en la que se generan las guerras, genocidios y corrupción.
- El mundo en el que vivimos responde a un modelo en donde se promueve la dominación, el control y el poder en sí mismo.
- Vivimos en una sociedad en donde se dan relaciones asimétricas y este modelo hace referencia a la cultura patriarcal.
- En la Violencia se niega la existencia del otro, se da una asimetría en la relación y se trata de imponer el poder por la fuerza.
Frecuentemente toma forma de castigo, es como si la persona violenta tuviese el derecho de hacerlo. Se puede definir al acto violento como un atentado a la integridad psicológica y física. Es necesario dejar de legitimar la violencia como una forma de pensar y vivir en sociedad.
- Debemos agudizar nuestra atención ante cualquier forma de abuso y dejar de mirar hacia otro lado y fingir que no ha pasado nada como sucede a menudo.
- Posibles Salidas Para reducir la violencia contra las mujeres podríamos comenzar por revisar las normas, valores y mitos que la toleran y la fomentan, así como todo aquello que refuerza actitudes sexistas, es decir la superioridad de un sexo sobre otro.
Las respuestas individuales a la violencia como ocultar, sufrir o evadirse no han tenido buen resultado. Por eso es necesario impulsar medidas alternativas colectivas que tienen mayor probabilidad de transformar esta situación. Comenzar en la niñez educando en igualdad de derechos, en igualdad de oportunidades.
- Tanto en la escuela como en la familia podemos tener en cuenta las necesidades de todos y todas.
- Una educación que integre las características femeninas y masculinas que reconozca las diferencias, y que las valore por igual, permitiría a las niñas construir una imagen valorizada de sí mismas con derecho a roles igualitarios y a los varones respetar los derechos de las mujeres, compartiendo con sus compañeras todos los ámbitos de la vida.
- Es necesario enseñarles a niños y niñas a decir: “No” cuando alguien los obliga a hacer algo que no desean y hacerles saber que confiamos en ellas, que confiamos en ellas y ellos, que los vamos a proteger.
Nadie está fuera de estas situaciones. Todos y todas podemos desde nuestro lugar contribuir a erradicar la violencia. Trabajar el reconocimiento de la violencia, en cada individuo, para que pueda ver las consecuencias que eso tiene en su vida cotidiana.
Cuando se vive en pareja, valorar y defender el derecho a una relación igualitaria, compartir decisiones y responsabilidades. También es necesario la prevención de una sexualidad abusiva y violenta. Esto implica revisar el modo en que nuestra sociedad y cada uno de nosotros vive la sexualidad con el fin de incorporar formas diferentes basadas en el respeto del otro.
Lograr el empoderamiento de las mujeres consiste en la habilidad que tengan para desarrollar su propio destino, para tomar sus decisiones, conseguir que se sientan capaces, responsables y legítimas para ocupar el espacio que elijan. Y para ello, es necesario aprender a poner límites.
Saber ponerlos es hacerse respetar y respetar a los demás. Nuestras vidas se construyen en vínculos con otros, somos seres en relación, aprendemos unos de otros. Es necesario tomar conciencia de nuestras diferencias, aceptarlas con respeto, sabiendo que hombres y mujeres somos iguales. Deseamos vivir en una sociedad mejor, más equitativa, sin violencia, con vínculos de integración, promoviendo una cultura de la paz, tanto teórica como práctica, donde podamos mujeres y varones ser asertivos.
Es decir con una posición de respeto de nuestras necesidades, manifestando nuestras convicciones, defendiendo nuestros derechos, teniendo en cuenta al otro, no necesitando ni violentar, ni someternos a la voluntad de otras personas. Lic. María Fernanda Sánchez.
- Terapeuta Gestáltica
- Miembro de Fundación Clínica de la Familia
- Nota publicada en diario Puntal el día sábado 22 de noviembre de 2016
¿Cuál es la causa principal de la violencia?
Mala salud de por vida – El daño que causa la violencia va mucho más allá del daño físico. La violencia provoca depresión, ansiedad y otros trastornos de salud mental. También contribuye a la aparición de cánceres, enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares y VIH/sida, pues las víctimas de la violencia a menudo tratan de hacer frente a sus experiencias traumáticas adoptando comportamientos de riesgo, como consumir tabaco, alcohol y drogas, así como con prácticas sexuales de riesgo.